Blanca Guerrero es una artista visual nacida en Madrid y criada en Nueva York. Se licenció en grabado en la Rhode Island School of Design (RISD) en 2012. Su obra ha sido expuesta internacionalmente en España, Estados Unidos, y Japón. En septiembre de 2021, se trasladó a Madrid después de 28 años en Nueva York.
El trabajo de Guerrero abarca la fotografía, la pintura y el collage para proponer lugares donde estar. Su proceso parte de un ejercicio de observación consciente, al tiempo que renuncia a sí misma ante ciertos paisajes, momentos o entornos; al producir su obra, regresa a esos instantes e intenta reflejar su experiencia visual y corporal.
Guerrero trata de perpetuar el carácter sensorial de fenómenos fugaces como el deslumbramiento del sol, la oscuridad de la noche, los distintos tonos de la penumbra, las veladuras de la niebla, o la luz en la superficie del agua y sus reflejos en el fondo. Su aspiración es siempre dar dimensión física a una percepción; un esfuerzo por plasmar la experiencia efímera de observar.